NI TAURO NI LIBRA... ES CANCER

De tener cáncer y no tenerlo poco diferencio…

Lo supo hace tiempo en una oficia blanca sentada en un mueble de cuero negro o tratando de imitarlo, le pareció estéril la oficina y solo pensaba en que de haber otra vida ella seria doctora para ser quien diera la noticia. No se asustó, no lo pensó, nadie sabía que ella estaba allí ese día y para alguien que planeó mil veces su fin esta no era una sentencia.

“La familia es lo más importante” solía decir el Sr. Juan y sus dos hijos lloraron mucho el día del funeral. La Sra. María era la abuela siempre con caramelos para todos y decía no le pares a esto “consíguete un hombre buen mozo” vainas de abuela pensé; también estaba la señora de la esquina que nunca hablo y me encantaba adivinar. Y yo la más pequeña, la consentida aunque a veces todos me miraban como “pobre niña”…

No me tengas lástima. Yo que casi nunca soy he sido mas que tú. Del alcohol, la gente, de fiestas y de libros he tenido las mejores experiencias, del humo siempre tuyo y nunca mío, de los cuartos oscuros, de los vacíos que no siempre son los mismos… y de los cerebros que me he cogido te asombraría saber lo que yo se. Del resto se que tu imaginación te dejara entender. No me tengas lástima que yo con mi cara de niña soy una grandísima hija de puta que se la vivió mas que tú.

De tener cáncer el vomito, de no tenerlo el alcohol. De tenerlo tú y de no tenerlo tú. De tener cáncer y no tenerlo yo poco diferencio, es que yo no lo tengo, lo tiene ella que solo cuando se desmaya soy yo. Yo aun tengo mi sonrisa y mis tacones que solo me quito por ti pero yo no tengo cáncer quien lo tiene es ella aunque a veces me arrastra y no me deja salir de la cama. En ocasiones pienso que se lo merece y hasta que lo va a extrañar. Mi cáncer es diferente, es rabia, ganas de sacarte de tu eterno letargo, incendiar tu cama para verte correr. esa si es mi batalla no el cáncer.