sábado, octubre 04, 2008

LA TERCERA PERSONA


Y me senté en el horizonte a ver el mundo en el que querías ser alguien, había tantos lugares a los que se podía ir, tantos idiomas por dominar. El lugar se contaminaba en sueños y se dormía en tus esperanzas. Todo va a estar bien - dije - aunque ya lo sabías. En mis ojos no había la inocencia que buscabas igual que faltaba en tu cara la dureza de otros días. Dijiste algo que me dio escalofríos, y no dejo de pensarlo, tal vez tiene menos importancia de la que le doy, pero hay días en los que me roba el sueño. Esto sólo tiene sentido para ti ser extraño al que aun no veo, y no conozco. Visto desde acá, el mundo parece fácil de digerir y tú pareces tener tanta hambre que solo diré buen provecho.